El
fresquito mañanero del otoño nos golpeaba en la cara. Los autobuses esperaban
en la puerta del instituto y los alumnos de primero aguardaban impacientes en
el hall porque era la primera vez que salían de las aulas para conocer uno de
los lugares más interesantes de nuestra ciudad, la Biblioteca de Andalucía.
Jorge
Luís Borjes dice “Siempre imaginé que el paraíso sería algún tipo de biblioteca”.
Y es que cuando entras a una de ellas cualquier cosa puede ocurrir para querer
pasar varias horas por sus pasillos, para ojear los centenares de libros que
nos hablan con sus increíbles portadas y tener el placer de disfrutar de ese
silencio que tanta calma trasmite.
Al
llegar allí, el músico Nahil Núñez nos
daba la bienvenida a su taller de música.
Nahil ha
viajado a través del mundo con la magia de sus ritmos árabes y ha tocado con
artistas tan internacionales como la propia Shakira.
Nos habló
también del poder que la música tiene sobre el ser humano desde antes de nacer.
Propiedades curativas y estimulantes para hacer nuestra vida más tranquila,
sencilla y llevadera. Y por último nos presentó varios instrumentos como el laúd,
la guitarra, el darbouka, nos contó parte de su historia y escuchamos algunas
de sus canciones.
El
taller fue muy interactivo porque nuestros alumnos fueron protagonistas en
varias ocasiones. Carmen de 1º ESO A tocó la guitarra acompañada de las palmas
de sus compañeros. Tarareamos algunas canciones, contestábamos a preguntas
relacionadas con la historia de la música. El ambiente fue el propicio para
quedarnos con las ganas de volver.
La
segunda parte de la visita fue un recorrido por todas las partes de la gran
biblioteca. Nos quedábamos pequeños ante tanta inmensidad de conocimiento, ante
tantas novedades literarias, ante las diversas secciones de literaturas del
mundo: árabe, china, francesa…hasta un largo pasillo nos condujo a la sección
de literatura infantil y juvenil. Nuestros pupilos dijeron que allí se quedaban
y así lo hicieron. Disfrutaron mucho con colecciones de libros que los
trasportaron a su infancia y para ellos fue un gran descubrimiento comprobar
que la biblioteca es un lugar agradable y repleto de aventuras que esperan ser
leídas.
Para
concluir la visita paseamos por las calles de Granada hasta coger el autobús en
el Arco de Elvira.
¿Habrá
más días como este? ¡Seguro que si!